No terminó de cantar Valió la pena, la primera canción del recital, cuando hubo un corte en el sonido de un minuto y medio. “Como se dice en Puerto Rico, esto sigue”, dijo a las 22:35 para iniciar el segundo tema y otra vez se interrumpió la conexión.
“Les voy a dar tiempo a los ingenieros para que arreglen todo y vuelvo en cinco minutos. Me voy a quedar hasta las cuatro o cinco si hace falta”, aseguró el salsero antes de salir de las tablas y hacer una pausa de 25 minutos.
Cuando los técnicos levantaron el pulgar los 11 músicos y tres coristas que acompañaron al artista volvieron a escena y Marc Anthony entonó Y hubo alguien. “Ahora sí mi gente”, dijo entusiasmado.
Las cerca de 25.000 personas que colmaron el estadio Tahuichi aguardaron pacientes recodando lo que pasó en junio de 2009. Pero, pronto, Marc hizo que todo fuera fiesta con sus éxitos como Hasta ayer, Contra la corriente y Vivir mi vida.
Antes, desde las 21:10, la orquesta cumbiera de los Hermanos Yaipén hicieron lo suyo por 45 minutos en la fría noche cruceña. Esta vez valió la pena esperar y así disfrutar con Marc Anthony
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