Jaime, hermano de César y de Emma, también figuras de la música nacional, busca ejercer la integración a través de la música. Paz, amor y armonía son las armas que propone para lograr su objetivo artístico, así describe la plataforma del proyecto que lleva adelante desde Santa Cruz de la Sierra junto con el también guitarrista Glen Vargas. Ambos dan los primeros pasos para dar vida a lo que será un nuevo disco en conjunto Junaro-Track.
Un feliz encuentro
“Estamos dando forma a un disco de estudio con Glen (líder de Track). Va a estar formado por el trabajo de ambos y la imagen que vamos a dar es totalmente integracionista. Glen es del oriente, yo de occidente y que se nos vea en un escenario me parece importante para sustentar lo que propongo”, comenta Junaro más que satisfecho por haber encontrado en su camino el disco Raíces de Vargas, en el que identificó las características y matices de la música que quiere alcanzar con sello y alma roquera.
Folclore sin contenido
Es precisamente rock lo que busca Junaro ante el “auge espectacular del folclore”.
El músico percibe que en los últimos años los ritmos nacionales invadieron el gusto, lo que le parece bien “porque el folclore era mal visto, la gente que lo practicaba era discriminada, ahora, especialmente la juventud de fraternidades (grupos andinos de danza) cultiva melodías nacionales”, señala.
Junaro no quiere enfrentarse al folclore, pero considera que la producción musical folclórica tiene ausencia de mensaje. “Es solo una música para los pies, se baila y punto. Solo queda la resaca del día siguiente”, critica.
Lo que él quiere es “seguir dando fe, esperanza y decirle al boliviano que la lucha por un mundo mejor no termina, que continúa porque se puede lograr un mundo mejor. Parece un sueño, pero los sueños se hacen realidad cuando luchamos por ellos. Si no tenemos sueños no se qué horizontes tendríamos”, se cuestiona Junaro.
Rock-mensaje
Jaime, en coincidencia con Glen Vargas, va a dar el mensaje que siente que hace falta en la música nacional a través del rock y cita un fragmento de un tema, Amor revolución, de su nuevo proyecto: “Ha llegado el día de ponerles fin a todas las cosas que nos hacen mal. Basta de mentiras que no tienen fin, basta de promesas, que viva el amor. Defiende la vida, defiende el amor, los cambios no vienen sin revolución...”.
Ese y otros contenidos tienen el fin de “levantar la moral y autoestima del boliviano. No siempre lo que viene de afuera es mejor que lo nuestro. Aquí hay muy buenas cosas, solo que nadie las apoya y eso es una pena”, remata Junaro.
Expectativa mayor
Amor rhebholution es el espectáculo más reciente que dio a conocer Jaime en La Paz y en Cochabamba a inicios de 2013. No quedó muy contento con él, lo confiesa. “El efecto fue bueno, debería quedarme tranquilo, pero no estoy contento porque mi expectativa musical está un poco más allá”, dice.
Fue en ese momento que conoció Raíces, donde Glen Vargas interpreta taquiraris, chobenas e incluso el himno cruceño y el boliviano en el marco del rock. “Eso es lo que busco para mi música”, dice Jaime contundente. Es así que el nuevo emprendimiento en conjunto tiene composiciones de ambos, con Glen Vargas como director musical y arreglista.
El disco va a tener entre 15 a 20 canciones. “Incluso hay un tema con texto de Glen que lo vamos a cantar con el vocalista de Track (Daniel Pesce). Queremos hacer todo lo necesario para dar esa imagen de integración, de que estamos juntos”, detalla Junaro.
El artista estuvo en Santa Cruz para concretar la nueva obra y para dar dos recitales en los que interpretó una selección de sus éxitos
Personaje
Vida y obra
Orureño, tiene cuatro décadas de dedicación a la música como cantautor y guitarrista y unas 60 composiciones en su haber.
música
Integró el grupo folclórico Savia Nueva. Actualmente, junto con su grupo de acompañamiento Tierra, ejerce como solista.
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