martes, 21 de septiembre de 2010

Chino y Nacho reniegan de la música “reggaetón”

Los cantantes venezolanos Jesús Alberto Miranda Pérez y Miguel Ignacio Mendoza, más conocidos como Chino y Nacho, volvieron a poner distancia del “reggaetón” y reivindicaron como propio el subgénero que las radioemisoras denominan “música tropical urbana”.
Aunque fueron integrantes de la banda “Calle ciega” y su carrera fue promovida por el “reggaetonero” Don Omar, los intérpretes de “Mi niña bonita” repitieron en Potosí lo que ya dijeron hasta el hartazgo a los medios venezolanos: ellos están en otra cosa.
“Nosotros al principio estuvimos buscando nuestro sonido por mucho tiempo y cuando hicimos ‘Mi niña bonita’ comprendimos que eso era lo nuestro”, dijo Chino anoche en la conferencia de prensa previa al concierto organizado por el Festival Internacional de la Cultura.
“Mucha gente nos tildaba de ‘reggaetoneros’ pero creo que el movimiento urbano es tan amplio que no se puede llamar ‘reggaetoneros’ a todos los cantantes de música urbana”, agregó.
Según explicó, en su música existen “muchas vertientes de salsa, de ritmos latinos tropicales que son de nosotros, con lo que nuestra interpretación es urbana”.
Así, “Mi niña bonita” sería un merengue urbano, “Tu angelito” merengue tropical urbano y “Lo que no sabes tú” es definido como “un mambo dominicano fusionado con un reggae roots jamaiquino”.
Sin mayores complicaciones, la música de Chino y Nacho (cuyo nombre comercial es Chino & Nacho, con el símbolo “&”) es un pop tropical basado en la cotidianeidad urbana. “‘Música tropical urbana’, ese es el mejor nombre que se le puede dar al género que estamos cantando actualmente”, dicen.
Y aunque el nombre parece forzado, las radioemisoras lo utilizan cada vez y, en una suerte de reconocimiento, los pinchadiscos admiten que los mayores exponentes de ese subgénero son Chino y Nacho.
“Niños bonitos”
Jesús Alberto Miranda y Miguel Ignacio Mendoza llegaron por tercera vez a Bolivia y esta vez luego de un largo periplo desde Panamá.
Su aeropuerto de ingreso fue el de Viru Viru, en Santa Cruz, de donde volaron a Sucre para llegar a Potosí en un vehículo expreso. Tardaron más de lo programado debido a que la maleta de Chino se perdió y hasta anoche no había noticias de ella.
“No saben a veces lo que pasa dentro de todo esto”, se quejaron los artistas anoche. “Me cambié de interiores hace cinco minutos”, agregó Chino haciendo un esfuerzo por derrochar simpatía.
La conferencia de prensa comenzó mucho más tarde de lo previsto, sobre las 22:00, y aunque antes llovieron recomendaciones como “que las fans demuestren cordura”, “nada de fotos” y otras, los dos artistas trataron a los asistentes con mucho profesionalismo.
Más cariño
Aunque estuvieron poco tiempo, porque la gente llevaba horas esperándolos en el estadio, contestaron a todas las preguntas, incluso las que no iban con sus convicciones.
Así, evitaron hablar de política porque “el artista tiene que ser imparcial” pero, al referirse a los presidentes de Bolivia y Venezuela, Evo Morales y Hugo Chávez, dijeron que es bueno que sean amigos. “Los países de Sudamérica deberíamos acercarnos un poquito más”, opinó Nacho.
Aunque Chino dijo que escuchó hablar de Potosí por un equipo de fútbol que derrotó 7-0 a uno de Venezuela, Nacho señaló que en el exterior se sabe más de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba, en ese orden. “Le hace falta un poquito más de cariño al turismo”, comentó al señalar que, con una mayor promoción, más gente vendría a sorprenderse con los atractivos de esta tierra.
¿Es malo el “reggaetón”?
Aunque muchos pinchadiscos insisten en calificarlo como “género”, el “reggaetón” todavía tiene las características de un subgénero musical porque procede del reggae en español fusionado con varias de las características del hip hop.
Según la enciclopedia en línea Wikipedia, tiene influencias de otros estilos de la región como la bomba, salsa, champeta, cumbia, vallenato y el merengue house.
En 2007, psicólogos de República Dominicana encontraron una relación directa entre el “reggaetón”, las drogas y el sexo debido a que, por lo menos en ese país, este tipo de música se bailaba con movimientos sensuales y las mujeres utilizaban muy poca ropa.
Esos comentarios no encontraron sustento científico y, en cambio, el “reggaetón” creció en popularidad gracias a exponentes como El General, Vico C, Don Omar y Daddy Yankee.
El concierto hizo cantar y bailar

Chino y Nacho en el escenario.
Los jóvenes que asistieron al concierto se dieron el gusto de cantar y bailar las canciones más conocidas que interpretó el dúo venezolano.
Las luces, el sonido y la pantalla gigante le dieron un toque especial mientras que el cuerpo de baile y Chino y Nacho se desenvolvieron ante las exigencias del público que llenó el escenario.
Los fuegos pirotécnicos llenaron el cielo y animaron el ambiente ante los gritos y aplausos, un espectacular momento de alegría que llenó los corazones.
En medio del espectáculo se entregó el trofeo de reconocimiento a los artistas como agradecimiento por el primer evento internacional del Festival de la Cultura.
Los sectores de las graderías y la zona VIP estuvieron repletos así que se da por hecho que se acabaron las localidades.
La presentación del dúo gustó mucho y varios quisieron tomarse una fotografía, algunos lograron su cometido y otros se contentaron con estar con las bellas bailarinas y los miembros de la orquesta.
Hubo muy pocas críticas sobre el espectáculo que sólo estuvo deslucido por la instalación de puestos de venta de bebidas alcohólicas fuera del estadio.

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