“Mientras estudiaba Comunicación Social en la Universidad Católica me postulé a la Beca Fullbright que otorga el gobierno de Estados Unidos, para completar mi formación profesional en la música. La misma que busqué por varios años y, finalmente, pude acceder gracias a mi perseverancia”, recuerda la cantante.
Tras acceder a la beca, Carla se fue a estudiar por tres años al país del Norte, donde se especializó en “Perfomance de Jazz Vocal”, que es la formación que se tiene para ser cantante de jazz.
“El paso del canto clásico al jazz no ha sido fácil, pues aún tenía vestigios de vibrato en mi voz, en lo cual trabajé bastante para corregir ese sonido. Gracias a la beca aprendí mucho, pues en Estados Unidos la formación inicial es en etapa de colegio, por esa razón fue un cambio muy duro”, explica Carla.
CANTAR JAZZ
La artista considera que aún está en proceso de formación y que tal vez, en algunos años más, recién podría considerarse como una gran cantante en este género musical. En el cual cada interpretación representa un momento único e irrepetible, que combina la improvisación vocal e instrumental.
“Para ser una cantante de jazz se necesita ser la líder de la banda, porque se necesita escribir los arreglos musicales, guiar en la ejecución para crear una canción, hay que ser una gran improvisadora y contar con una serie de elementos que están ligados completamente a la capacidad y formación profesional”, asegura Casanovas.
El jazz es un género musical que ha crecido poco a poco en la preferencia de la ciudadanía boliviana, en particular con la celebración de los festivales, en los cuales no solo se ven los grupos locales, sino a nivel internacional. Son los jóvenes quienes muestran este género musical tan exquisito.
“Este género ha crecido con el Festijazz, porque no sólo permite la reunión de artistas locales y extranjeros. En particular, porque gracias a este evento la gente conoce un poco más del género musical con los grandes maestros de jazz que tiene Bolivia y más aún con los alumnos que están siguiendo estos pasos”, dice la cantante.
En el repertorio que se tiene en el evento de jazz, existe una fusión de este género con pop y folklore, ya que participan grupos de otros departamentos como Cochabamba, Santa Cruz y Tarija, entre otros.
LA ARTISTA
Nació en La Paz, bajo el signo de leo, Carla Casanovas ha mostrado desde temprana edad su gusto por la música, en sus participaciones en colegio, en la Sociedad Coral Boliviana, en el Conservatorio de Música y más aún al formar parte de una de las bandas más representativas de jazz como lo es la Big Band Bolivia.
A pesar de no provenir de una familia de músicos, la música siempre estuvo presente en su vida gracias a los discos de jazz que escuchaba su mamá, tenía algo en su interior que la impulsaba a inclinarse por el canto, pues tenía una facilidad increíble para aprender las canciones.
“Empecé en casa cantando villancicos navideños, luego al ingresar en el colegio participé de los coros por la facilidad que tenía, después fui parte de la Sociedad Coral Bolivia como solista por muchos años y, posteriormente, ingresé en el Conservatorio de Música para aprender a tocar saxofón, pero luego fui derivada a canto clásico por la facilidad que tenía para hacerlo”, recuerda la cantante.
Luego de varios años de postularse para la Beca Fullbright la obtiene y se forma profesionalmente como cantante de jazz en Estados Unidos, al cabo de tres años retorna al país para dedicarse a la enseñanza de canto en el Conversatorio de Música sin dejar de lado sus presentaciones musicales.
“Este año dejé de enseñar canto para dedicarme por completo a mis presentaciones. Di un giro a mi vida, pese a que tenía un poco de temor en principio, gracias a Dios y al empeño que pongo en lo que hago, tengo actuaciones casi cada fin de semana, la gente me sigue por facebook y sabe lo que estoy haciendo”, dice la cantante.
Carla grabó con la Big Band Bolivia y ha participado en más de 50 producciones con otros artistas, en diversos géneros musicales, lo que muestra la versatilidad que tiene en sus interpretaciones y lo que ahora le faltaría es realizar una producción propia.
“Luego de haber colaborado en las producciones de varios artistas locales e internacionales, mi próximo proyecto es el convertirme en solista y presentar mi propio material, aunque aún no hay una fecha determinada de presentación, trabajaré para que en poco tiempo esto sea una realidad”, finaliza Casanovas.
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