domingo, 1 de julio de 2012

Nuevas propuestas refrescan la escena musical boliviana

No tienen un género definido. Apuestan, más bien, por fusionar estilos y crear sonidos propios. Algunos definen su trabajo como “música orgánica y de contenido genético”, mientras que otros ven a su propuesta cual si fuera “una obra teatral”. Éstos son sólo algunos ejemplos de una lista de músicos que han surgido los últimos años en el país.

“Desde 2008 han emergido en Bolivia, quizá con Reverso, bandas que apuestan por nuevas estéticas”, explica Gabriela Durán, quien recientemente hizo una selección de discos que persiguen esta tendencia para ofertarlos en el Mercadito Pop, una venta de arte al aire libre.

Reverso, banda cuyo líder es el actor Cristian Mercado, tiene a la fecha cuatro discos. El más reciente, Desniveles, fue presentado a fines de 2011. “Cada canción es para nosotros como una obra de teatro nueva. En ellas nos damos la licencia de seguir nuestros gustos y nuestras influencias”, explica Mercado. Por ello, en la producción se puede escuchar desde un rock balcánico hasta sonidos retro e incluso temas que recurren a sonidos andinos.

Pero no es la única banda, pues desde entonces han aparecido músicos que buscan refrescar el oído, como el dúo Abrelata, fundado en 2008, o Gato Diablo, ¿Traes flash?, La Burkina, Voz abierta, Timpana y Sibah, que debutaron los años siguientes.

“Son propuestas que transgreden, que no son fáciles de digerir a primera escucha y que por lo tanto son muy poco difundidas”, dice el productor musical Óscar García. “En sus propuestas hay un esfuerzo estético. Cada uno propone distintos lenguajes musicales que contribuyen al desarrollo de la música popular de nuestro medio”, agrega.

Sonidos con personalidad

“Nuestra música es orgánica y de contenido genético. Fusiona estilos y busca crear un lazo entre México y Bolivia”, comenta la boliviana Valeria Müller, quien junto a su compañero, el mexicano Gabo Navarro, lideran ¿Traes Flash? La banda presentó hace un mes su EP Nostalgias, como adelanto de su segundo disco.

La producción recurre a ritmos bolivianos como la morenada, para fusionarlos con sonidos “del mundo”. “Hacemos un sinfín de mezclas siempre siguiendo nuestro estilo, que no es más que una gozadera”, comenta Müller.

Un sonido quizá “más ruidoso” propone la banda Gato Diablo, en su segunda producción La importancia de tener un cuerpo, presentada en febrero. “Es un disco influenciado por el new age. Creamos un ruido que saca de onda, aunque siempre buscamos un balance entre lo ruidoso y lo bonito”, explica Mauricio Calsich, miembro de la banda.

Si se trata de fusiones, La Burkina trae una propuesta a la que han decidido llamar “rock mutante” y que se puede escuchar en EP Mecánica, estrenado el 2011. “Hacemos una mezcla de géneros y éstos nunca terminan siendo definitivamente una cosa. No tenemos un estilo”, asegura Sebastián Zuleta, líder del quinteto.

La creatividad también llega junto a Abrelata, que en su disco Desordenadas, guerreras, lagartas, ateas... crean música con una base de instrumentos convencionales como las guitarras y los teclados que se combina con otros creados por las artistas. “Nos valemos de los sonidos que salen de una olla con canicas o de los rollos de scotch. Esas cosas alimentan nuestro sonido”, dice Adriana Aramayo.

En tanto que el proyecto Timpana, que presentó 2011 su disco Alma perdida, ofrece una especie de banda sonora para diez poesías que escribió su principal impulsora, Alejandra Lanza. “Podría ser la fusión de un folk contemporáneo”, dice la artista.

Punto de vista
óscar García Productor musicalEn nuestro medio estamos acostumbrados a formar músicos para la repetición y así no para la creación. Estos esfuerzos son fundamentales, pues tenemos un montón de músicos que se dedican a tocar covers y a hacer tributos. De lejos es mucho más importante crear que repetir, lamentable es que aún hay muy poco público para estas propuestas y creo que básicamente es porque esto se trata de un círculo opa. No hay público porque esta música no se difunde, porque la propuestas de estas bandas no se escuchan.

Tal vez la escuchemos en esporádicos programas especializados, pero no así en la programación diaria de las radios, menos en la televisión. Por la falta de difusión es que tenemos muy pocos referentes.

Creo que la formación de un público responderá en la medida en que se difundan estas propuestas.


El 2012 vio nacer a Santa Juana...
Si de debuts se trata, la escena musical le dio la bienvenida este año al dúo Santa Juana de los Mataderos, formado por Wara Cajías y Bernarda Villagómez, quienes presentaron su disco Epitafio de dos mujeres caídas ante la circunstancia de un adoquín elevado al momento de su muerte.

“No nacimos con la idea de ser un dúo y tener una propuesta. Nacimos a raíz de un pasanaku creativo que organizábamos con las amigas. Al tener nueve canciones en borrador, Bernarda y yo nos dimos cuenta que podíamos lanzar un disco y seguir divirtiéndonos”, cuenta Cajías.

Según la artista, cada canción de este disco cuenta una historia diferente. “Al no ser un dúo resuelto desde el principio hemos tenido la posibilidad de jugar y experimentar con distintos estilos”, señala. “Porque no tratamos de ser diferentes, nuestra propuesta es diferente, entretenida y además con estilo”, concluye.


Sergio Calero Director de Radio DeseoEstos grupos tienen la necesidad de no ser encasillados, quizá porque actualmente no está sorprendiendo mucho la producción musical. Son propuestas que tienen el objetivo de buscar la diferencia. Eso hace que sean inclasificables, lo cual es muy es bueno. No creo que sean producciones no comerciales, todos estos grupos necesitan que se vendan sus discos. Lo importante es que quieren hacer, producir y vender su música pero con una propuesta propia y ése es el valor que tienen. Ya depende del público que los aprecie o no, lo importante es que están apostando a hacer algo auténtico y eso alimenta el arte de toda ciudad y de todo país.

Sobre el público para estas propuestas, creo es un panorama complicado porque requieren espacios de difusión. Sin embargo, creo que estos grupos coinciden en que su éxito no es masivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario