El viernes 21, el café Lorca recibe un grupo de artistas chilenos de los cuales uno de ellos interpretará un performance audiovisual. Rodrigo Araya, con su proyecto "Montaña Extendida", tocará composiciones de sonidos acompañadas de lo visual por el trabajo de Nicolás Rupcich. Ellos viene viajado desde Chile para llegar a una exposición programada por el curador Rodolfo Anduar en Asunción, Paraguay.
"De esta forma construir flujos y conexiones para desarrollar ideas en relación a nuestros trabajos, adquiriendo más claridad de lo que significa estar en este lado de la construcción cultural y como se relaciona, se acoge en estos otros lugares las problemáticas que nosotros desarrollamos desde nuestra posición geopolítica de ser chilenos", señala Rodrigo Araya, acerca de la intención de este largo viaje.
Proyecto "Montaña Extendida". Dentro de la presentación en el Kiosko se prepara una perfomance audiovisual que explica el creador como el resultado, de varias composiciones con este proyecto que denominé "Montaña Extendida", señala Arraya.
Son temas elaborados con sonidos recuperados de registros de música popular, cosas encontradas que le llamaron la atención en Internet, junto con otros desarrollados mediante softwares especializados e instrumentos analógicos grabados y manipulados. "Todos juntos en un intento medio arqueológico, en el que intento organizarlos para articular un tema con un desarrollo a pesar de que contienen distintos significados y proveniencias" , resume.
Performance y espacio. Cada vez que Rodrigo presenta en vivo estos temas los organiza de alguna forma distinta, pensando en el lugar que los acogerá e incluyendo partes que se improvisan en el momento de la performance en vivo.
"De esta forma logro organizar un momento en el que se pueden leer distintas estrategias de administración del espacio y el tiempo por medio de la música, espacios súper concretos construidos por medio de momentos que remiten a la historia de la música electrónica globalizada, como es la música industrial o estructuras y armonías extraídas de música tradicional y folclórica -parte del imaginario musical que podría tener cualquiera al vivir en este extremo del continente- versus otros espacios espontáneas y viscerales que tienen que ver con la intensidad y la forma en que se deconstruyen estos sonidos por medio de distintos tipos de manipulaciones" finaliza.
Además añade que su intención es la de diseñar una experiencia que demande la total atención de los sentidos, desde la manera en que el sonido afecta el cuerpo e invita a tener conciencia de estar experimentando el ahora, hasta como se pueden elaborar relaciones sobre la proveniencia de los sonidos, la manera en que se ordenan y se manipulan en contradicción con el lugar que nos parecería esperable que tuvieran.
Sobre las imágenes. Las imágenes proyectadas por Nicolás, son imágenes que el a desarrollado especialmente para trabajar en paralelo con la música de Rodrigo y al igual que los sonidos, también son manipuladas en vivo mediante procesos digitales, constituyendo por medio de la sinestesia otra capa que intenta interpelar al que participa de este momento.
Han trabajado bastante en conjunto, y se entienden plenamente en la dimensión que significa construir diálogos entre los medios. "En ambos casos nos interesa investigar mediante la manipulación de imágenes y sonidos extraídos de distintas fuentes y lugares (registros de tecnologías desfasadas, internet, distintos registros de video y fotografía, grabaciones de campo, etc.), la forma en que estan mediados por las construcciones y los significantes que estas transportan, como nos relacionamos con lo que representan, la forma en que se alojan en su memoria".
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