"Hace tiempo que teníamos muchas ganas de venir”, afirmó Diego Bartaburu, baterista de la banda uruguaya No te va gustar. Y así fue. El miércoles, el Cine Teatro Municipal 6 de Agosto de La Paz fue el escenario de un encuentro inédito entre los nueve miembros del grupo, periodistas y sus fans bolivianos. En ese espacio, la banda habló sobre sus composiciones, su primera visita a Bolivia y sus 20 años de trayectoria.
La conversación duró casi una hora. Los uruguayos hablaron también de la grabación de su más reciente disco, denominado El tiempo otra vez avanza, en el que trabajaron con el reconocido productor Joe Blaney.
A pesar de que fueron nominados cinco veces a los premios Latin Grammy, los integrantes de NTVG se mantienen humildes. El grupo está integrado por Emiliano Brancciari (guitarra y voz), Gonzalo Castex (percusión y coros), Martín Gil (trompeta y coros), Denis Ramos (trombón), Mauricio Ortiz (saxo), Guzmán Silveira (bajo), Bartaburu, Pablo Coniberti (guitarra) y Francisco Nasser (teclados).
Durante la entrevista respondían las preguntas y en los intervalos se pasaban de mano en mano un termo con mate.
"Bolivia era el único de los países latinoamericanos al que no habíamos visitado y teníamos muchas ganas de venir lo más pronto posible. Por suerte, ya estamos acá”, aseguró sonriente Bartaburu.
Después, Ortiz tomó la palabra y agradeció la bienvenida de sus fans en el aeropuerto de El Alto, la noche anterior. "Tuvimos un buen recibimiento, les agradecemos mucho por recibirnos y esperar allí”, dijo.
Cuando le tocó hablar a Brancciari, recordó su primera visita a La Paz, hace 14 años, cuando compró un charango en un mercado paceño. Además, aseguró que quería irse del país con música boliviana en la maleta.
Pero cuando se les preguntó sobre el contenido de sus temas, Brancciari respondió: "Cada canción es particular. Un montón de cosas nos motivan a escribir, lo que sentimos, lo que nos pasa, lo que le pasa a la gente cercana o imaginaria, lo que vemos alrededor como parte de la sociedad, y nos preocupa, desde una mirada subjetiva, obviamente”.
El vocalista agregó que buscan cantar y decir lo que piensan acerca del mundo y de distintos sentimientos, "porque hablar de lo mismo sería aburrido”. De alguna manera esa postura se ve reflejada en canciones diferentes como Clara, Verte reír, No necesito nada, Chau y otras.
Tras varias preguntas, el tema central de la conversación fue su llegada a Bolivia. "Sabemos que hace tiempo la gente quería que vengamos a tocar acá. El concierto es una oportunidad única para tratar de conquistar a primera vista a la gente que nunca nos vio”, dijo Brancciari.
El músico agregó que "viajar y conocer lugares, como su país, nos hace adquirir cosas de la música local de cada lugar, directa o indirectamente”.
La banda afirmó que vive un gran momento por "la cohesión humana de los integrantes y el nivel musical al que llegaron”, lo que se hizo evidente en su concierto, cuando NTVG conquistó a los paceños con un recorrido de más de dos horas por los éxitos de sus nueve discos. Además estrenaron dos canciones: Comodín y Sombrero. Y es que para ellos el éxito, según Brancciari, es "tocar con la gente que quieres y lo que quieres. El resto es perseverancia, mucho trabajo y suerte”.
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