jueves, 9 de agosto de 2012

La realidad de la música actual

La música de las últimas cinco décadas es poco imaginativa y "previsible", según un estudio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, que ha analizado casi medio millón de canciones compuestas desde 1955 hasta 2010.

Estas canciones tienden a parecerse más entre ellas que las antiguas y son cada vez más homogéneas y con menos sonoridades. A esto se suman los cambios de acordes sencillos, instrumentos comunes y el volumen fuerte. Por otro lado, están los cambios sobre canciones antiguas que pueden hacer que suenen como nuevas, pero sólo son una reedición.

El trabajo dirigido por Joan Serrá también da cuenta que en la década de los 60, por ejemplo, grupos como Pink Floyd experimentaban mucho más con la sonoridad que ahora.

El investigador considera que este proceso de homogeneización podría deberse a la fuerza de las modas, ya que "se observa una tendencia a engancharse a la corriente dominante".

"Los parámetros musicales en las canciones son como las palabras de un texto y hemos observado que cada vez hay menos palabras diferentes", manifestó.

Dijo también que dada una nota musical, es relativamente fácil predecir cuál será la siguiente en una canción actual. Del mismo modo, las composiciones musicales más recientes también presentan una menor diversidad de timbres y tienden a interpretarse con los mismos instrumentos.

10 años de artistas de los “reality show”

Artistas formados en los “reality show” son el nuevo resultado del “mercadeo” musical de la primera década del nuevo milenio para formar una estrella, según el músico Ezequiel Méndez. Antes los artistas hacían prevalecer sus talentos y calidad musical.
De las compañías pasan al internet

La situación actual muestra un fenómeno imposible de eludir: la progresiva extinción de las grandes compañías discográficas y su desaparición como amos y señores de la música. Este proceso tuvo un claro y marcado comienzo desde la comercialización del material de algunos artistas (el material original o de Copyright) a través de internet con sitios como Itunes y ahora youtube.

Los músicos tienden a dejar de ser sometidos a la presión de compañías porque pueden vender su música en forma independiente.


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