Según la Real Academia Española, Conciliábulo significa “reunión, generalmente ilegal o ilegítima, para tratar de algo que se desea mantener oculto”. Rodrigo Villegas utilizó este término, en plural, para nombrar el decimosegundo disco de Llegas, la banda que lidera desde hace 19 años. La placa fue compuesta, escrita, arreglada y producida por el propio ‘Grillo’ y cuenta con nueve temas grabados con la actual formación del grupo: Julio Jaime (bajo), Diego Ballón (teclado), Daniel Subirana (batería), Mayra Gonzales (voz) y Villegas en la guitarra y la voz principal.
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El sonido del álbum es vintage y para lograr esto, la agrupación utilizó instrumentos y amplificadores fabricados en los años 70.
Escenas escuchó el disco en orden cronológico y te podemos adelantar que la placa empieza con Buscando, un manifiesto personal del Grillo versión 2014 en clave de rock pop. “He reducido mi círculo vital, estás afuera, no te aguanto más”, canta con el coro de Gonzales. “…trasmites mediocridad, que tengas suerte”. Jamás una patada en el trasero fue tan melódica.
En Tripulante acelera el ritmo con un rock más filoso, con esos cortes típicos de Llegas. “Somos la orquesta del Titanic, encubramos el golpe, viene un gran naufragio”. Este es el primer corte de difusión y tiene un videoclip dirigido por Martín Boulocq.
Ausente es una hermosa canción que los seguidores de Llegas celebrarán por los destellos de jazz con piano. “Si lees la Biblia al revés es un mundo destruido por la ambición e intolerancia, sin el poder y la exploración, todo ha renacido en dos amantes desafiando a Dios”, entona Mayra con su voz de estrella soul.
Salar es la primera en la que Gonzales aparece en la voz principal. Una balada rock, con un bajo dominante y un final épico, que se queda en la mente. “Vida, ven a tomar sol, hace tanto frío arriba, sol, dime quién nos mira, grita con todas tus fuerzas”.
Indefinidamente es una canción de cuna de guitarra y voz. “Aceptar no significa que acabará, eso no pienso decirlo nunca. Te quedarás indefinidamente sobre mí, lo siento, eso ya lo decidí, soy así”. Una pieza de colección en la discografía de Llegas. Es una joyita que toca las fibras más profundas.
Con Cacería vuelve el rock y los acordes muy propios del Grillo. Lo más fiel a su firma en el disco con un guiño que no conoceremos nunca. “Salgo a caminar, veo a mis examigos, creo que pediré una urgente revisión”.
Efecto crónico es otra ‘rocker’ con piano jazzero y guitarra distorsionada de consecuencia bailable. “Diseño nuevos días, bendiciones, atravieso el viento solar levantándote, cambio mi táctica para jugar, elijo recordar un nuevo mundo”.
Cerca del final
Ranura es una espectacular rareza con las que el Grillo suele sorprender. Una guitarra distorsionada flota sobre una base simple de arreglos exquisitos y la voz de Villegas, que parece una plegaria. “Me perdí y desde adentro descubrí que a todos les duele igual, se mueren de miedo en la soledad. Cuando está todo mal todo tan mal, hay una ranura”.
Agua para vos es el tema más jazzista del disco, con un Ballón libre y luminoso. En la batería, Subirana demuestra por qué se ganó la confianza y la admiración de uno de los mejores roqueros del país.
Concialiábulos es un álbum limpio, brillante, donde Villegas obtiene nota sobresaliente como productor, compositor e intérprete, porque para cantar sus piezas hay que saber sufrirlas, mimarlas, revelarlas
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