Muchos los encasillan como exponentes de la ‘movida madrileña’, una corriente contracultural surgida durante los primeros años de la transición de la España posfranquista, otros los definen como un estandarte de la ‘nueva ola, movimiento de efímera pero intensa vida en la cultura española.
Lo cierto es que Los Secretos llevan casi 40 años de carrera y, aunque no tuvieron una difusión masiva en el país, se convirtieron en una de las bandas de pop-rock más legendarias de habla hispana. Ahora, el público boliviano tendrá la oportunidad de escucharlos en vivo en el concierto que ofrecerán el martes 28 del presente en Hard Rock Café.
Después del éxito obtenido en su gira 2017 por España, durante más de seis meses, y a punto de cumplir cuatro décadas sobre los escenarios, Los Secretos cruzan de nuevo el continente y comenzarán otra de sus giras internacionales por cuatro países de América Latina. Tras su paso por México el año pasado, esta última etapa de 2017 se concentrarán en Sudamérica, donde no se presentaban desde 2014. Perú, Paraguay, Argentina y, por primera vez, Bolivia disfrutarán de sus canciones.
Las entradas ya están disponibles a través de superticket.bo en dos sectores: general a Bs 280 y vip a Bs 500. Un porcentaje del dinero recaudado por la venta de entradas irá destinado al Hogar Teresa de los Andes.
Historia
Durante varios años el núcleo principal de Los Secretos estuvo integrado por los hermanos Urquijo: Javier, Enrique y Álvaro. En 1978 los tres se juntaban con José Enrique Cano ‘Canito’, un amigo baterista de Enrique desde el colegio, y comenzaba a soñar con la música, tocando en salas amateur bajo diferentes nombres hasta que se conforman como el grupo TOS.
En 1980, la sobria portada en blanco y negro del primer EP de Los Secretos escondía a cuatro joyas del pop, encabezadas por la imperecedera
Déjame, que convirtieron ese disco en una cotizada pieza para coleccionistas.
Su época de mayor éxito profesional se dio en los 90, cuando encadenaron los exitosos álbumes Adiós, tristeza y Cambio de planes y, posteriormente, el recopilatorio Grandes éxitos.
Un momento muy delicado en su historia llegó en 1999 con la muerte de Enrique Urquijo, un duro golpe que, sin embargo, contribuyó a un renacer de la banda con la publicación del álbum homenaje A tu lado, en 2000, que contó con colaboraciones de artistas cercanos al grupo.
Uno de los personajes más cercanos a ellos ha sido Joaquín Sabina, con quien Enrique Urquijo se conoció a principio de los 80. Juntos compusieron una pieza que, partida en dos, se convirtió en símbolo de cada artista, Y nos dieron las diez y Ojos de gata. Urquijo también puso la música para otro himno ‘sabiniano’: Por el bulevar de los sueños rotos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario