Tiësto, el famoso DJ holandés, tocó en vivo durante el desfile de los atletas en la ceremonia de apertura oficial de los Juegos Olímpicos de Atenas y el miércoles 16 hizo vibrar a los paceños con “La Paz hagan ruido” en el estadio “Mariscal Braun” de la zona de Miraflores.
Eso habla de la dimensión del artista que llegó por primera vez a la sede del Gobierno donde tiene miles de seguidores que llenaron el escenario.
A las 11.30 del mismo día del concierto, en el Hotel Casa Grande de la zona de Calacoto, ofreció una conferencia de prensa para los medios de comunicación. Tiësto (40), nació el 17 de enero de 1969, en la ciudad de Breda, Holanda. El nombre completo del Dj es Tijs Verwest, contó que se llama así por haber abrieviado su nombre sacándole la “j” y al final de su apellido le añadió la “o” para que sea más corto y llamativo artísticamente.
Con la ayuda en la traducción del inglés al español de Carlos Mealla, gerente de la Cervecería Boliviana Nacional (CBN), Tiësto contestó cada una de las preguntas de los periodistas con mucha amabilidad.
Dijo que tenía mucho interés en conocer Bolivia y en la primera oportunidad que tuvo no podía desperdiciar y que se sentía muy bien conocer La Paz por la diversidad cultural y porque “Bolivia es un país especial”.
Incluso le preguntaron la relación de la música electrónica con las drogas y Tiësto señaló que las “drogas están en todas partes y no exclusivamente en este tipo de música”.
Y en la noche, a eso de las 22.40, fue el reventón en el estadio miraflorino porque estaba repleto para recibir al mejor Disc jockey de música dance y trance del mundo.
Un juego de luces espectaculares fue el marco electrónico que dio apertura al gran concierto de Tiësto, haciendo conocer su último álbum de estudio, Kaleidoscope hasta las 24.40.
El holandés, el mejor Dj de música electrónica bailable comenzó su carrera poniendo discos desde sus 16 años y se consagró a los 23 ganando infinidad de premios internacionales y nominado al Grammy por el mejor álbum de música electrónica Elements of Life en 2005, hizo bailar a la gente por dos horas continuas, al extremo que la alegría del público fue tal que el sector VIP-Este estuvo a punto de desplomarse, pero gracias a la intervención de la policía se evitó un accidente. Algunas personas no quisieron dejar ese espacio y se produjo un forcejeo y la policía los dispersó con gases lacrimógenos.
Sin embargo, pese a ese incidente del que muchos no se percataron, seguía el concierto a todo ruido.
Una muestra de la afluencia de fans es que había gente de Brasil, Chile, Perú, México, Inglaterra, Israel, entre otros. También llegaron muchos turistas del interior.
Pese a que las entradas costaban 350 bolivianos en el área VIP y 130 en la cancha, las mismas se agotaron con anticipación. Para algunos fans eran entradas caras para nuestro medio, sin embargo, dijeron que para un concierto de esta magnitud vale la pena pagar.
Extraoficialmente se conoce que la llegada de Tiësto costó unos 450 mil dólares y toda la organización por lo menos un millón de dólares.
Gracias a la iniciativa de Líquid Producciones el público de La Paz pudo obervar uno de los mejores eventos del año tan solo con imaginarse que se utilizó unos 80 equipos de luces, 20 Vari Lite de 1 metro de alto, 18 strobos de 3.000 watts y más de 20 cabezas móviles MAC 2000 entre otros.
Fueron dos horas de baile sin parar al mejor ritmo de música electrónica
Eso habla de la dimensión del artista que llegó por primera vez a la sede del Gobierno donde tiene miles de seguidores que llenaron el escenario.
A las 11.30 del mismo día del concierto, en el Hotel Casa Grande de la zona de Calacoto, ofreció una conferencia de prensa para los medios de comunicación. Tiësto (40), nació el 17 de enero de 1969, en la ciudad de Breda, Holanda. El nombre completo del Dj es Tijs Verwest, contó que se llama así por haber abrieviado su nombre sacándole la “j” y al final de su apellido le añadió la “o” para que sea más corto y llamativo artísticamente.
Con la ayuda en la traducción del inglés al español de Carlos Mealla, gerente de la Cervecería Boliviana Nacional (CBN), Tiësto contestó cada una de las preguntas de los periodistas con mucha amabilidad.
Dijo que tenía mucho interés en conocer Bolivia y en la primera oportunidad que tuvo no podía desperdiciar y que se sentía muy bien conocer La Paz por la diversidad cultural y porque “Bolivia es un país especial”.
Incluso le preguntaron la relación de la música electrónica con las drogas y Tiësto señaló que las “drogas están en todas partes y no exclusivamente en este tipo de música”.
Y en la noche, a eso de las 22.40, fue el reventón en el estadio miraflorino porque estaba repleto para recibir al mejor Disc jockey de música dance y trance del mundo.
Un juego de luces espectaculares fue el marco electrónico que dio apertura al gran concierto de Tiësto, haciendo conocer su último álbum de estudio, Kaleidoscope hasta las 24.40.
El holandés, el mejor Dj de música electrónica bailable comenzó su carrera poniendo discos desde sus 16 años y se consagró a los 23 ganando infinidad de premios internacionales y nominado al Grammy por el mejor álbum de música electrónica Elements of Life en 2005, hizo bailar a la gente por dos horas continuas, al extremo que la alegría del público fue tal que el sector VIP-Este estuvo a punto de desplomarse, pero gracias a la intervención de la policía se evitó un accidente. Algunas personas no quisieron dejar ese espacio y se produjo un forcejeo y la policía los dispersó con gases lacrimógenos.
Sin embargo, pese a ese incidente del que muchos no se percataron, seguía el concierto a todo ruido.
Una muestra de la afluencia de fans es que había gente de Brasil, Chile, Perú, México, Inglaterra, Israel, entre otros. También llegaron muchos turistas del interior.
Pese a que las entradas costaban 350 bolivianos en el área VIP y 130 en la cancha, las mismas se agotaron con anticipación. Para algunos fans eran entradas caras para nuestro medio, sin embargo, dijeron que para un concierto de esta magnitud vale la pena pagar.
Extraoficialmente se conoce que la llegada de Tiësto costó unos 450 mil dólares y toda la organización por lo menos un millón de dólares.
Gracias a la iniciativa de Líquid Producciones el público de La Paz pudo obervar uno de los mejores eventos del año tan solo con imaginarse que se utilizó unos 80 equipos de luces, 20 Vari Lite de 1 metro de alto, 18 strobos de 3.000 watts y más de 20 cabezas móviles MAC 2000 entre otros.
Fueron dos horas de baile sin parar al mejor ritmo de música electrónica
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