Hubo queso y vino a granel, pero la mesa del festival no podía estar completa sin el ingrediente musical, que estuvo a cargo del grupo tarijeño Cantares, del conjunto de daza Alma y Malambo y del plato fuerte de la noche: Soledad, la popular cantante argentina que subió al escenario, cerca de la medianoche, para deleitar al público con chacareras, zambas y chamamés, ritmos característicos del folclore argentino.
La ‘Sole’ puso de manifiesto su particular estilo desde el incio de su show. Carismática, habló de las bondades del vino, recordó al ícono del folclore Horacio Guaraní (interpretó uno de sus temas), hizo cantar a todos Llorando se fue, de Los Kjarkas y contagió su energía a medida que se calentaba el ambiente, alzando el poncho y revoleándolo en el aire, mientras varios la seguían con sus chamarras.
El menú musical se repetirá hoy, mañana y el sábado.
La ‘Sole’ puso de manifiesto su particular estilo desde el incio de su show. Carismática, habló de las bondades del vino, recordó al ícono del folclore Horacio Guaraní (interpretó uno de sus temas), hizo cantar a todos Llorando se fue, de Los Kjarkas y contagió su energía a medida que se calentaba el ambiente, alzando el poncho y revoleándolo en el aire, mientras varios la seguían con sus chamarras.
El menú musical se repetirá hoy, mañana y el sábado.
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