domingo, 14 de agosto de 2016

Pedro Guerra 27 de agosto, a las 19:30, en el auditorio Illimani del Campo Ferial Chuquiago Marka.

La primera vez que el cantautor español Pedro Guerra pisó tierra boliviana sintió un poco de miedo. Fue en agosto de 2012. "No sabíamos muy bien cómo respondería el público”, comentó. "Recuerdo la primera visita con muchísimo cariño”, añadió.

Luego, en 2014, el músico regresó con la expectativa de revivir la experiencia. Y sí fue. Este mes, dos años después de su última visita, la historia se repetirá. El reencuentro del español con sus fans bolivianos será el próximo 27 de agosto, a las 19:30, en el auditorio Illimani del Campo Ferial Chuquiago Marka.

Y como en los anteriores encuentros, Guerra volverá a la ciudad del Illimani con una maleta llena de sorpresas. Una de ellas es el estreno de sus dos nuevos discos Arde Estocolmo y 14 de ciento volando 14.


La última vez que nos visitó fue hace dos años. ¿Qué recuerda de su segundo concierto? ¿Cuáles son ahora sus expectativas?

El recuerdo del segundo concierto es el mismo que el recuerdo del primero: una acogida calurosa y llena de cariño. Eso mismo espero de este tercer concierto y estoy prácticamente seguro de que así será.

¿Qué significa para usted otro reencuentro con sus fanáticos?

Siempre regreso a Bolivia con muchísima ilusión y, como decimos en España, con las pilas cargadas.
Para este nuevo concierto, usted estrenará sus dos nuevos discos Arde Estocolmo y 14 de ciento volando 14.

¿Qué representan estos trabajos discográficos en este momento de su carrera?

Creo que suponen el momento más álgido de mi carrera, teniendo en cuenta que he asumido en estos dos trabajos todas las tareas que requiere la creación de un disco: composición, arreglos, producción, elaboración de secuencias rítmicas e interpretación de todos los instrumentos.

En el primer disco, Arde Estocolmo, ¿qué busca transmitir con esta colección de canciones?

No hay una sola cosa que uno quiere transmitir. Son un conjunto de 14 canciones que transmiten 14 sentimientos diversos: sociales o personales, pero indagando siempre en la condición humana.

En el caso del segundo disco, ¿Cómo ha sido el proceso de poner música a 14 sonetos de Joaquín Sabina? ¿Ha sido difícil seleccionar estos sonetos del libro de poesía Ciento volando de catorce de Sabina? ¿Qué comentario le dio él sobre este trabajo?

Elegí los sonetos que consideré más proclives a convertirse en canción. A Sabina le encantó la idea desde el primer momento en que se la conté. La música es la que yo considero que el propio soneto ya contenía.

Después de sus dos visitas a Bolivia, ¿ya ha logrado conocer la música y la cultura boliviana?

No en profundidad. Algo conozco de la música andina y de algunos de los trovadores de su país.

¿Por qué eligió a los músicos bolivianos, como el dúo Negro y Blanco, La Imilla y Vero Pérez, para compartir el escenario en su concierto? ¿Qué canciones interpretará con ellos?

Lo que vamos a hacer lo dejamos como sorpresa para el público que asistirá al evento. Decidí compartir con ellos, porque cada uno, en su estilo, me parece de lo más interesante.

Tiene más de 30 años de trayectoria, ¿cómo recuerda sus inicios?, ¿qué cambios destaca? ¿qué se mantiene?

En esencia, me veo igual que hace 30 años, concibo mi trabajo de la misma manera, y me siento con la guitarra y el papel, para escribir las canciones movido por las mismas motivaciones.

Desde su álbum Golosinas (1995) hasta sus dos recientes trabajos, ¿cuáles considera que han sido las temáticas recurrentes en sus trabajos? ¿Identifica alguna característica común?

Hay temáticas que se repiten, que regresan de vez en cuando: el mestizaje cultural, la memoria histórica...

Tal vez es una pregunta ya recurrente, pero ¿a qué le canta actualmente Pedro Guerra?

Le canto, fundamentalmente, a la vida y a las pequeñas o grandes cosas que le dan sentido y la conforman.

En la composición ¿cómo maneja la relación entre contenido y texto?

Bueno, lo que quiero que una canción contenga, lo que quiero contar no es difícil de decidir, me resulta más complicado encontrar la manera de decir lo que quiero contar.

¿Cuánto le sirven las redes sociales para acercarse a sus fans?

Como herramienta de difusión, las redes me resultan prácticas y necesarias. Para eso las usamos, para hacer llegar al público nuestros conciertos y nuestros proyectos. Pero no soy muy fanático, me parece una herramienta importante para el trabajo.

¿Qué opina de la relación entre la música y la política? ¿Usted esta de acuerdo con la conjugación música y política?

Yo creo que soy un ser político, y por tanto, mi música también lo es. Intento aportar lo que puedo, desde el lugar en el que me encuentro, a la transformación del mundo y a la búsqueda de una sociedad menos discriminatoria y más igualitaria.

Usted ha trabajado en una producción sobre Pablo Neruda. ¿Qué otros poetas latinoamericanos admira?
¡Conoce el trabajo de algún poeta boliviano?

No conozco la poesía de Bolivia. Ésa es una tarea pendiente. Me gustan muchos poetas latinoamericanos: César Vallejo, Alejandra Pizarnik, Alfonsina Storni, Idea Vilariño, José Watanabe, Roque Dalton, Ernesto Cardenal, Enrique Lihn... La lista podría continuar y sería interminable.



El cantautor estrenará Arde Estocolmo y 14 de Ciento volando de 14

El cantautor español Pedro Guerra pisará por tercera vez suelo boliviano para presentar sus dos nuevos discos Arde Estocolmo y 14 de Ciento volando de 14, en el marco de su gira promocional por América Latina. El concierto se realizará el próximo 27 de agosto, a las 19:30, en el auditorio Illimani del Campo Ferial Chuquiago Marka.

"Pedro Guerra presenta sus dos nuevos discos en una gira por Latinoamérica. Entonces, nos preguntaron si estamos interesados en su regreso por tercera vez al país, obviamente aceptamos”, contó emocionado Jean Claude Eiffel, de la productora Sonidos del Mundo, que organiza el recital.

"Es una alegría saber que Pedro está muy interesado en volver a Bolivia. Se sintió muy feliz con sus dos anteriores visitas (2012 y 2014) por la recepción del público. Las presentaciones estuvieron muy llenas”, añadió el productor.

Según Eiffel, a diferencia de sus dos anteriores conciertos, el músico llegará acompañado de su pianista. "En los otros dos recitales, Pedro vino con guitarra al hombro”, dijo.

Arde Estocolmo y 14 de ciento volando de 14 son los discos que Guerra publicó de forma simultánea en abril. El primero es una colección de canciones originales del artista canario que datan desde 2011.

El segundo es un disco en el que el artista ha puesto música a 14 sonetos de Joaquín Sabina y para el que ha contado con un amplio plantel de colaboradores. Entre los artistas invitados en el álbum 14 de ciento volando de 14 están Rozalén, Dolo, Dani Martín, Nach, Paco Cifuentes, Ana Belén y Víctor Manuel.

"Con este disco ha conseguido juntar a la selección mayor de músicos en Iberoamérica, porque participan los pesos pesados de España, y a artistas latinos como Julieta Venegas, Silvio (Rodríguez), Jorge Drexler, entre otros”, explicó Eiffel.

Las entradas tienen un precio de 320 bolivianos. Se venden a través de SuperTicket.bo. Además, desde ayer se habilitó un punto de venta en La Chiwiña (San Miguel). Se ofertarán el 14 y 21 de este mes, en el espacio de trovadores en la Feria de El Prado.

Su trayectoria

Vida Nacido en 1966 en Güimar, en Tenerife, el artista dio el salto a la fama en 1993 cuando, junto a Luis Pastor, se asentó en Madrid con su guitarra y "tres o cuatro casetes llenos de canciones”, según cuenta el músico en el libreto de su disco Vidas, editado en 2008.
Carrera En Madrid, Guerra comenzó a cantar en Libertad 8, un pequeño local en el que su carrera despegó y en el que cantó por primera vez Contamíname, una canción que luego le pedirían Víctor Manuel y Ana Belén y que fue un éxito internacional. Al poco tiempo se gestó su primer disco, Golosinas, en 1995.

Pedro Guerra, su universo propio y sus nuevas búsquedas

"Yo escribo y canto sobre el día a día, lo que escucho, lo que veo, lo que leo, las personas a las que admiro… ésas son mis fuentes. Pero además canto a las cuestiones que me preocupan, no sólo a nivel personal, sino también a nivel colectivo. Y es que en cada canción hay una intención de mejorar uno mismo e intentar mejorar el mundo”.

Así respondió hace dos años Pedro Guerra cuando se le preguntó a qué le canta. Y sigue manteniendo esa forma de pensar. "Le canto, fundamentalmente a la vida, y a las pequeñas o grandes cosas que le dan sentido y la conforman”, sostuvo hace tres días.

Nació el 2 de junio de 1966 en Güimar, provincia de Santa Cruz de Tenerife (Canarias), España. Se inició en la música con el Taller Canario de la Canción. Con este grupo editó cuatro discos. En 1993 inició su carrera en solitario.

En 1995, el español grabó su primer álbum Golosinas. Luego le siguieron Tan cerca de mí (1997), Mararía (BSO) (1998), Raíz (1998), Ofrenda (2001), Hijas de Eva (2002) y Bolsillos (2004). A la lista se suman trabajos como Vidas (2008), Alma mía (2009), Contigo en la distancia (2010), El mono espabilado (2011), 30 años (2013) y 20 años Libertad 8 (2014).

Este año, el cantautor presenta dos discos Arde Estocolmo y 14 de ciento volando de 14.

Un encuentro con los bolivianos

Para el intérprete de Contamíname, es importante conocer las tendencias de la música contemporánea. Por esa razón, el español se animó a compartir el escenario con músicos bolivianos.

"La música es un espacio de intercambio y de relación. La música invita a este tipo de intercambios”, aseguró el cantante.

La decisión de Guerra fue confirmada por Jean Claude Eiffel, de la productora Sonidos del Mundo, que organiza el recital. El productor contó que el intérprete de Derroche fue quien tuvo la idea de compartir el escenario con los artistas bolivianos. "Tenemos la alegría que Pedro sugirió cantar con artistas bolivianos, como el dúo Negro y Blanco, La Imilla y Vero Pérez”, adelantó. "Los ha escuchado en las redes de YouTube; entonces, él los ha elegido a ellos”, agregó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario