miércoles, 10 de octubre de 2012

Sepultura, una de las bandas de metal más grandes de la historia, vuelve a La Paz



- ¿Qué te parece volver a Bolivia y qué recuerdas de la anterior presentación de Sepultura en La Paz?
- Estamos muy contentos de volver a Bolivia. Hace ocho años tocamos en La Paz, donde brindamos un concierto fantástico gracias al público. Los bolivianos son muy fanáticos y eufóricos, y esa noche realmente lo demostraron.

- ¿De qué habla el nuevo disco, Kairos?

- Kairos habla de Sepultura. Los dos discos anteriores fueron como bandas sonoras de obras literarias (La Divina Comedia, La naranja mecánica), ahora es como si hubiésemos escrito nuestra propia historia. En Kairos están nuestros fanáticos, la familia, los amigos, los sellos discográficos y diversas vivencias. Musicalmente tenemos un poco de todo, combinamos la fuerza del trash, las cosas más orquestales y la percusión brasileña con sonidos modernos.

- Además, en Kairos vemos una especial atención a la guitarra, con solos más elaborados. ¿Representa eso una evolución en tu trabajo?
- Por supuesto. Hacía mucho tiempo que no me sentaba en el estudio para trabajar únicamente los solos porque optaba por improvisar con la guitarra y grabar lo que surgía. Los temas de este disco están más pensados con el fin de obtener un resultado distinto. Responsable en parte de que esto sea así es el productor Roy Z. Estoy muy contento con mi momento como músico.

- Son casi 15 años desde que Derrick Green ingresó en remplazo del exvocalista y fundador Max Cavalera. ¿Cómo ha sido trabajar con Green todo este tiempo?

- Derrick representó una de las incorporaciones más importantes del grupo. Su aporte en la parte letrista ha sido fundamental. Es una persona muy documentada e informada sobre temas históricos, artísticos y de actualidad. Todo ese conocimiento lo plasma de forma creativa en la elaboración de los discos, tanto en la música como en la imagen. Además que sabe mantener una química especial con el público.

- La salida de Max dividió las opiniones y las preferencias entre los fanáticos. ¿Consideras qué fue lo mejor para la banda?

- No sé si lo mejor, pero era algo que tenía que pasar porque todo evoluciona y los fanáticos lo saben. Cuando Max estaba en el grupo salieron tres discos totalmente diferentes (Arise, Chaos A.D. y Roots), y ya en esa época escuchábamos fanáticos con voces discordantes respecto a estos trabajos. Entonces, las opiniones distintas estuvieron siempre, es comprensible porque son 27 años de historia y se han vivido muchas cosas en el camino. No solamente la salida de Max dividió las aguas, los cambios musicales que buscamos permanentemente en cada nuevo disco también han generado posturas contrarias, como también la aceptación total.

- ¿Cuál ha sido el común denominador del grupo en estos más de 27 años?

- La honestidad nos ha llevado lejos. Nunca dejamos que las disqueras nos obliguen a hacer lo que no queremos, somos libres en la actitud y en las ideas. Esa libertad no tiene precio para un artista.

- ¿Qué representa ser una banda brasileña de metal?
- Es muy importante eso, a pesar de que cantamos en inglés, hemos llevado el nombre de nuestro país por todo el mundo. Además, actualmente vivimos y trabajamos en Brasil. No hay nada para un brasileño como estar en casa, con la familia, disfrutando de tu cerveza preferida y viendo un partido de fútbol.

- ¿Qué te parece que Brasil organice el próximo Mundial de Fútbol?
- Seguro va a ser una fiesta, como el Carnaval. Lo que no me gusta son las cosas políticas detrás de la organización. Hay mucha pobreza, pero estamos construyendo estadios millonarios, algo innecesario en un país que tiene infraestructura por demás.


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