Antes de sus ansiadas vacaciones, la intérprete del popular "Desátame" visitará Norteamérica con su espectáculo "Madame Noir", que llevará a Nueva York, Los Ángeles y San Francisco el 24, 26 y 28 de febrero, respectivamente, para finalizar en marzo su tour en México con dos citas en la capital del país y una en Guadalajara.
"ESTOY AGOTADA", comentó Naranjo quien muy a su pesar tuvo que reducir en América el número de actuaciones en las que repasa trabajos como "Tarántula", "Chicas malas" o "Minage" con una ambientación propia del cine negro de la primera mitad del siglo XX.
"La gira iba a ser mucho más extensa... Chile, Venezuela, Argentina, pero siento que no voy a estar al cien por ciento y hay que ser muy sincera, necesito descanso", explicó.
Mónica Naranjo confesó que ha llegado a un punto en el que lo que desea es vaciar su agenda de compromisos y poder "llegar a casa" para estar con sus seres queridos.
"Ese espacio familiar que necesitamos los seres humanos de tanto en tanto", manifestó la cantante, que entre sus planes para 2012 figura viajar con su hijo a Berlín para asistir como público a un concierto de heavy metal.
"Me ha dicho que como no le acompañe me retira la palabra, o sea que ahí estaré, Mónica la madre, dándolo todo por mi hijo y por Rammstein (el grupo musical)", confirmó Naranjo, que a sus 37 años tiene claro que por "salud mental" debe separar su faceta personal de la profesional.
"La Naranjo es una diva. El personaje se creó altivo, inaccesible, poco sociable, pero ese concepto es mi trabajo y ese trabajo no me lo llevo a casa. Si tuviera que criar a mi hijo dentro esos parámetros se volvería loco. Imagínate: ´Mamá, mamá, ¿me haces un puré de verduras? ¿Yo? No, cariño. Que te lo haga la sirvienta", señaló.
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